Cuando por esas cosas de la vida, nos vemos obligados a estar de luto y la tristeza se encarga de tomar nuestro corazón con fiereza...tenemos dos opciones, dejarla que vaya tomando de a poco todo nuestro cuerpo, nuestra voluntad, la poca energía que nos queda y casi sin querer derrumbarnos...o bien...dejar que la tristeza nos recorra, que cale bien profundo en nosotros, vivir el duelo, reconocerlo, pero no dejar que nos derrote, juntar fuerzas, sumarnos con quienes quieren y pueden ayudarnos a levantarnos y así de a poco, ir saliendo hacia la luz.
Rosario está de luto, el dolor los sorprendió y las muertes pegaron más fuerte por no haber sido esperadas, pero Rosario junta voluntad y sale por los que se fueron y sobre todo por los que quedaron. En medio del luto, el Festival Solidario por los damnificados fue un profundo suspiro de alivio, artistas se sumaron a dar una mano, las entradas se fijaron en $30, $70 y $ 100 para que todos pudieran estar presentes y colaborar de acuerdo a las posibilidades. Rosario organizó, cobró entradas, escuchó música y recaudó $ 450.000.- para seguir levantándose.
Rosario está de luto, pero de pie y diciéndose a cada paso...¡FUERZA, ROSARIO!
Rosario está de luto, el dolor los sorprendió y las muertes pegaron más fuerte por no haber sido esperadas, pero Rosario junta voluntad y sale por los que se fueron y sobre todo por los que quedaron. En medio del luto, el Festival Solidario por los damnificados fue un profundo suspiro de alivio, artistas se sumaron a dar una mano, las entradas se fijaron en $30, $70 y $ 100 para que todos pudieran estar presentes y colaborar de acuerdo a las posibilidades. Rosario organizó, cobró entradas, escuchó música y recaudó $ 450.000.- para seguir levantándose.
Rosario está de luto, pero de pie y diciéndose a cada paso...¡FUERZA, ROSARIO!
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